Marciano Gómez, un médico para la conselleria de Sanidad
València, 19 jul (OFFICIAL PRESS-EFE).- El nuevo conseller de Sanidad, Marciano Gómez, regresa a un departamento donde ya ocupó diversos cargos de responsabilidad durante varias legislaturas en las que estuvo al frente el Partido Popular y fue impulsor en la gestión sanitaria para la implantación de la colaboración público-privada de la eficiencia en la salud pública.Un médico para dirigir Sanidad
Licenciado en Medicina y Cirugía, especialista en Medicina familiar y comunitaria y especialista universitario en acreditación de centros y servicios sanitarios, Gómez ha asegurado tras conocer su nombramiento que tiene «muchas ganas de trabajar para abordar los problemas que hay en la Sanidad» y que una de sus primeras medidas será «el CICU de Alicante», que fue cerrado en enero por el anterior Consell.
Marciano Gómez, nacido en Cuenca, comenzó su vida institucional en agosto de 1995, cuando el entonces conseller de Sanidad, Joaquín Farnós, lo nombró director general de Asistencia Especializada.
En junio de 2000, Marciano Gómez dejó la dirección general de Prestación Asistencial pasa ocupar la subsecretaría de la Agencia Valenciana de la Salud, cargo en el que sustituyó a Rubén Moreno, que entonces fue nombrado secretario general de Gestión y Cooperación Sanitaria del Ministerio de Sanidad.
Posteriormente fue nombrado secretario autonómico de la Agencia Valenciana para la Salud, pero cuando en 2004 el Consell aprobó una nueva estructura orgánica de este departamento, entonces dirigido por Vicente Rambla, Gómez presentó su dimisión ya que perdía competencias al ser nombrado Manuel Cervera como director de la Agencia Valenciana de la Salud pero con rango de secretario autonómico.
Marciano Gómez y su vinculación a la Sanidad
En su etapa como secretario autonómico puso de manifiesto su intención de construir en la comarca de La Marina Alta un nuevo hospital gestionado mediante concesión administrativa y siguiendo el modelo implantado en el centro hospitalario de Alzira, al considerar que era «ágil» y resolvía «las necesidades sanitarias de manera eficaz».
También como alto cargo tuvo que lidiar con algunas crisis sanitarias como el brote de hepatitis C causada por el anestesista Juan Maeso, la muerte de una decena de personas en tratamiento de hemodiálisis en la Clínica Virgen del Consuelo de Valencia o el síndrome Ardystil, que produjo la muerte de seis trabajadoras de empresas de la aerografía textil de l,Alcoiá-Comtat, en Alicante.
Gómez es también Máster en Dirección y organización de hospitales y servicios de salud, máster en gestión para la humanización de la sanidad y máster en hospitalización domiciliaria.
Fue impulsor en la gestión sanitaria para la implantación de la colaboración público-privada de la eficiencia en la salud pública y de la normativa que regula las guardias médicas, tanto en el ámbito de la atención primaria como de la hospitalidad vigentes en la actualidad. Actualmente es director del área de gestión clínica médica en el Hospital Universitario La Fe.